La succión digital se convierte en problema a partir del tercer año de edad, previo a ello es normal que un niño se chupe el dedo, la mano y etc; pues la boca es su principal herramienta exploratoria durante el primer año de vida. El chuparse el dedo puede ser peligroso dependiendo de la frecuencia, intensidad, duración y posición del dedo en la boca, pues pueden tener como consecuencia alteraciones alvéolodentales, maloclusiones, mordida abierta, mordida cruzada, resorciones atípicas de las raíces, y deformaciones faciales. La presencia de este hábito después de los 4 años genera igualmente cambios en la tonicidad muscular de labios y bucinadores, retarda su maduración, dificulta la masticación y deglución. Todo esto puede afectar a la fonación y respiración.
Pero que debo hacer para no permitir que mi hijo continúe con este hábito?
En primer lugar nunca le digas "NO te metas el dedo a la boca", el reprimir a tu pequeño por esta actitud va originar mayor ansiedad, por lo tanto va a aumentar su necesidad de chuparse el dedo. Procura persuadirlo brindándole objetos o actividades para que su mano se encuentre ocupada, especialmente en espacios de descanso. La afectividad y maduración emocional es primordial, un niño que crece en un ambiente afectivo cálido y aceptado es un niño que no tiene predisposición a desarrollar una situación de ansiedad. Asi también procura erradicar por completo el hábito chupón antes del primer año de edad.
Mucha suerte!
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